El reinado de Justiniano I (527-565) se caracterizó por éxitos militares y culturales. También, por la desgracia sufrida en el año 543, la Plaga de Justiniano. Un tercio de la población perdió la vida.
El emperador, reforzó las fronteras del antiguo Imperio Romano como acción protectora contra los persas. Después de salir victorioso en la Batalla de Dara, Justiniano I se propuso la conquista de Occidente. Fueron anexionados, el reino vándalo (incluyendo las islas de Córcega, Cerdeña y Baleares), Dalmacia y finalmente en el año 536 Roma tras ocupar el sur de Italia.
También se conquistaron extensos territorios del sur de la Hispania visigoda. Provincia de Spania sería el nombre que recibiría.